Cambios en las transferencias bancarias para 2025: todo lo que debes saber
Cambios en las transferencias bancarias para 2025: todo lo que debes saber
A principios de 2024, el Parlamento Europeo adoptó nuevas reglas para garantizar que las transferencias bancarias lleguen inmediatamente a las cuentas de los particulares y las empresas de la UE. Este reglamento, que busca “evitar esperas a los clientes minoristas y las empresas, especialmente las pymes, así como mejorar la seguridad de las transferencias”, entró en vigor en España el 9 de enero de 2025, fecha tope en la que las entidades bancarias debían adoptar estas medidas. Pero ¿qué implica esta nueva normativa para los usuarios? Vamos a verlo.
Igualación de comisiones entre transferencias inmediatas y ordinarias
Las transferencias inmediatas permiten enviar dinero en cuestión de segundos, sin tener que esperar al menos 24 horas para poder disponer de ese dinero en tu cuenta. Hasta el 9 de enero de 2025, estas transferencias inmediatas solían tardar unos 20 segundos en hacerse efectivas, y llevaban aparejadas comisiones, por lo general bastante más altas que las transferencias ordinarias.
Con el nuevo reglamento, las transferencias inmediatas deben tener las mismas comisiones que las ordinarias. Es decir, si tu banco ofrece transferencias ordinarias gratuitas, estará obligado a eliminar también los costes adicionales de las inmediatas. Esta reforma beneficia no solo a los particulares, sino también a las empresas, que verán cómo se agilizan los pagos sin incurrir en gastos adicionales.
Según la nota de prensa emitida por el propio Parlamento Europeo, esta norma también establece que “la inmediatez de las transferencias deberá garantizarse con independencia del día o la hora; el dinero deberá llegar a la cuenta del destinatario en un plazo de 10 segundos”. Y añade que “el ordenante también debe ser informado en un plazo de diez segundos de si los fondos transferidos se han puesto a disposición del receptor”.
¿El fin de las comisiones abusivas?
Aunque se espera que este cambio sirva para poner fin a las comisiones abusivas, de hasta 12€, que cobraban algunas entidades bancarias por las transferencias inmediatas, existe una cierta inquietud por saber qué va a ocurrir realmente ahora que la nueva normativa está ya en vigor: ¿desaparecerán estas comisiones? ¿dejarán de ser gratuitas las transferencias ordinarias, para igualarse a las inmediatas?
Hay que tener en cuenta que la norma establece que los cargos por las transferencias inmediatas no podrán ser superiores a los aplicados a las operaciones de transferencia ordinaria, pero esto no implica per se que estos traspasos convencionales no puedan subir de precio.
Aunque son muchos quienes piensan que “la banca nunca pierde”, y las entidades terminarán derivando estos gastos a sus clientes de una forma u otra, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) no cree que esto vaya a suceder. Los tres escenarios que plantea la OCU pasan por que quienes no aplicaban comisiones empiecen a hacerlo; que se deje de cobrar por las transferencias inmediatas online; y que segmenten a los clientes ofreciendo transferencias gratuitas solo a algunos. Esta última parece la opción más probable.
Los propios bancos no prevén grandes cambios en sus políticas, y muchos están ya cambiando sus sistemas, con el planteamiento de que todas las transferencias, tanto inmediatas, como ordinarias, sean gratuitas en canales online, mientras que sí se aplicará cargo mediante vía telefónica o presencial.
De hecho, la Asociación de Usuarios Financieros (Asufin) comunicó el mismo día de entrada en vigor de la medida que el precio medio oficial fijado por la banca para igualar el importe de las transferencias ordinarias e inmediatas iba a ser de 2,95 euros, según sus cálculos. Esta cifra supone un encarecimiento de hasta un 124% del coste de las ordinarias en los últimos años, pero es un ahorro de 3,69 euros respecto al coste medio de las transferencias inmediatas en 2024.
El impacto en los métodos de pago alternativos
Asufin apuntó que la mayoría de los clientes no tendrán que pagar estas comisiones por los acuerdos de vinculación del usuario con las entidades bancarias y por el contexto de la política de gratuidad de Bizum. Esto lleva a plantearse qué va a ocurrir con estos métodos de pago alternativos, que suelen ofrecer pagos rápidos de forma gratuita, y que ahora afrontan un nuevo desafío.
Sectores digitales como el comercio electrónico o el juego online son los que más suelen utilizar estos métodos de pago. Bizum sigue siendo una herramienta muy útil y cómoda, sobre todo para transacciones entre particulares, pero la competencia de las transferencias instantáneas entre cuentas bancarias podría redefinir su papel en el mercado.
Otros métodos alternativos para pagos digitales, como PayPal, Neteller, Skrill o Paysafecard, también pueden verse afectados, sobre todo en sectores como el del juego online, donde no siempre garantizan la inmediatez del cobro de beneficios. En este caso, los casinos online que aceptan Paysafecard como pago parten con cierta ventaja, ya que, al tratarse de una tarjeta prepago, ofrece, al menos, mayores garantías de privacidad y anonimato.
La importancia de la seguridad
Ante el posible riesgo de fraudes como el phishing, el Parlamento Europeo ha incluido en la normativa una serie de medidas de seguridad, destinadas a proteger tanto a los usuarios como a las entidades bancarias.
En primer lugar, los bancos deben aplicar medidas sólidas y actualizadas para detectar y prevenir el fraude. Para ello, deben ofrecer, sin coste adicional, un servicio que verifique la identidad del destinatario. Además, también deben permitir que sus clientes fijen un importe máximo para las transferencias instantáneas en euros, que podría modificarse antes de ejecutar una nueva transferencia.
Finalmente, las entidades bancarias que ofrezcan transferencias instantáneas también deben verificar si alguno de sus clientes está sujeto a sanciones u otras restricciones por blanqueo de capitales o financiación del terrorismo. Según estas nuevas reglas, si el banco no cumple con sus obligaciones de prevención del fraude y esto provoca un perjuicio financiero a algún cliente, el usuario afectado podrá solicitar una compensación