Efemérides de Juan Manzanares García del 31 de julio

31 JULIO

La frase de hoy.

No pienso nunca en el futuro porque llega muy pronto.

ALBERT EINSTEIN

Personaje del santoral del día.

IGNACIO DE LOYOLA

Ignacio nació probablemente, en 1491, en el castillo de Loyola en Azpeitia, población de Guipúzcoa, cerca de los Pirineos. Su padre, don Bertrán, era señor de Ofiaz y de Loyola, jefe de una de las familias más antiguas y nobles de la región. Y no era menos ilustre el linaje de su madre, Marina Sáenz de Licona y Balda. Iñigo (pues ése fue el nombre que recibió en el bautismo) era el más joven de los ocho hijos y tres hijas de la noble pareja. Íñigo luchó contra los franceses en el norte de Castilla. Pero su breve carrera militar terminó abruptamente el 20 de mayo de 1521, cuando una bala de cañón le rompió la pierna durante la lucha en defensa del castillo de Pamplona. Después de que Iñigo fue herido, la guarnición española capituló.

Los franceses no abusaron de la victoria y enviaron al herido en una litera al castillo de Loyola (su hogar). Como los huesos de la pierna soldaron mal, los médicos consideraron necesario quebrarlos nuevamente. Iñigo se decidió a favor de la operación y la soportó estoicamente ya que anhelaba regresar a sus anteriores andanzas a toda costa. Pero, como consecuencia, tuvo un fuerte ataque de fiebre con tales complicaciones que los médicos pensaron que el enfermo moriría antes del amanecer de la fiesta de San Pedro y San Pablo. Sin embargo, empezó a mejorar, aunque la convalecencia duró varios meses.

Con el objeto de distraerse durante la convalecencia, Iñigo pidió algunos libros de caballería (aventuras de caballeros en la guerra), a los que siempre había sido muy afecto. Pero lo único que se encontró en el castillo de Loyola fue una historia de Cristo y un volumen de vidas de santos.

En febrero de 1523, Ignacio partió en peregrinación a Tierra Santa. Se embarcó en Barcelona, pasó la Pascua en Roma, tomó otra nave en Venecia con rumbo a Chipre y de ahí se trasladó a Jaffa. Del puerto, a lomo de una mula, se dirigió a Jerusalén, donde tenía el firme propósito de establecerse. Pero, al fin de su peregrinación por los Santos Lugares, el franciscano encargado de guardarlos le ordenó que abandonase Palestina, temeroso de que los mahometanos, enfurecidos por el proselitismo de Ignacio, le raptasen y pidiesen rescate por él. Por lo tanto, el joven renunció a su proyecto y obedeció, aunque no tenía la menor idea de lo que iba a hacer al regresar a Europa.

En 1524, llegó de nuevo a España. Una piadosa dama de Barcelona, llamada Isabel Roser, le asistió mientras estudiaba la gramática latina en la escuela. Ignacio tenía entonces treinta y tres años, y no es difícil imaginar lo penoso que debe ser estudiar la gramática a esa edad.

Al cabo de dos años de estudios en Barcelona, pasó a la Universidad de Alcalá a estudiar lógica, física y teología; pero la multiplicidad de materias no hizo más que confundirle, a pesar de que estudiaba noche y día.

Posteriormente se trasladó a París. En 1534, a los cuarenta y tres años de edad, Ignacio obtuvo el título de maestro en artes de la Universidad de París.

Las palabras fervorosas de Ignacio, abrió los corazones de algunos compañeros. Por aquella época, se unieron a Ignacio otros seis estudiantes de teología: Pedro Fabro, que era sacerdote de Saboya; Francisco Javier, un navarro; Laínez y Salmerón, que brillaban mucho en los estudios; Simón Rodríguez, originario de Portugal y Nicolás Bobadilla. Movidos por las exhortaciones de Ignacio, aquellos fervorosos estudiantes hicieron voto de pobreza, de castidad y de ir a predicar el Evangelio en Palestina, o, si esto último resultaba imposible, de ofrecerse al Papa para que los emplease en el servicio de Dios como mejor lo juzgase. La ceremonia tuvo lugar en una capilla de Montmartre, donde todos recibieron la comunión de manos de Pedro Fabro, quien acababa de ordenarse sacerdote. Era el día de la Asunción de la Virgen de 1534.

Ignacio y sus compañeros decidieron formar una congregación religiosa para perpetuar su obra. A los votos de pobreza y castidad debía añadirse el de obediencia. Además, había que nombrar a un superior general a quien todos obedecerían, el cual ejercería el cargo de por vida y con autoridad absoluta, sujeto en todo a la Santa Sede. A los tres votos arriba mencionados, se agregaría el de ir a trabajar por el bien de las almas adondequiera que el Papa lo ordenase.

El Papa Paulo III aprobó la Compañía de Jesús por una bula emitida el 27 de septiembre de 1540. Ignacio fue elegido primer general de la nueva orden y su confesor le impuso, por obediencia, que aceptase el cargo. Empezó a ejercerlo el día de Pascua de 1541 y, algunos días más tarde, todos los miembros hicieron los votos en la basílica de San Pablo Extramuros.

Ignacio pasó el resto de su vida en Roma, consagrado a la colosal tarea de dirigir la orden que había fundado.

Durante los quince años que duró el gobierno de San Ignacio, la orden aumentó de diez a mil miembros y se extendió en nueve países europeos, en la India y el Brasil. Como en esos quince años el santo había estado enfermo quince veces, nadie se alarmó cuando enfermó una vez más. Murió súbitamente el 31 de julio de 1556, sin haber tenido siquiera tiempo de recibir los últimos sacramentos.

Fue canonizado en 1622, y Pío XI le proclamó patrono de los ejercicios espirituales y retiros.

EFEMÉRIDES DEL 31 DE JULIO

©Juan Manzanares García

-1250. Se reinstaura la sede episcopal de Cartagena mediante la Bula "Spíritu Exultante", emitida en Lyon por el Papa Inocencio IV.

-1589. El Regidor Don Martín de Cifuentes denuncia al Concejo que, el francés Julián Junge había edificado una casa destinada a fabricar jabón junto a las Puertas de Murcia, pidiendo que sea derribada, porque desde dicho edificio se puede hostilizar a pedradas a los soldados que defienden las puertas.

-1596. Llegan noticias de que la Armada inglesa posiblemente vendría a atacar Cartagena, por lo que se envían correos a Murcia, Lorca, Alhama, Totana, Caravaca y demás lugares de ésta comarca para que manden de 3.000 a 4.000 hombres armados para la defensa de la ciudad.

-1601. El Ayuntamiento de Cartagena acuerda la construcción de las torres de defensa de Calnegre y el Portús, debiendo tener las siguientes dimensiones: diámetro interior, 58 palmos; grueso de los muros, 16; altura hasta el pretil de las almenas, 60.

-1604. La parte montañosa de Cartagena estaba infestada de lobos que producían grandes daños al ganado. Había muchos cazadores de lobos, pero no era suficiente, por lo que el Concejo manda hacer y poner por los montes, zaraza (masa compuesta de carne picada mezclada con vidrio molido, agujas y perdigones) para exterminarlos.

-1612. El Cabildo de Cartagena acuerda que se obligue a los cosecheros y taberneros a vender el vino por medida y no por peso.

-1639. Acuerda el Cabildo, escribir a un médico muy famoso de Granada para que ejerza su profesión en Cartagena y a cambio se le abonarán cuatrocientos ducados al año y las costas que fuesen necesarias para su traslado y establecimiento en la ciudad.

-1761. Se hace cargo de las obras de la construcción del Arsenal el ingeniero Mateo Vodopich.

Mateo Vodopich pasó a depender del Cuerpo de Ingenieros de Marina en 1770 mientras terminaba la muralla. Traspaso que se realizó con bastantes complicaciones hasta que fue obligado a entregar los planos a Romero Landa, que en aquellos momentos era comandante de Ingenieros de Marina.

-1789. En el Arsenal de Cartagena tiene lugar la botadura de la fragata "Perla" de 34 cañones.

-1810. Se acuerda que, en el Parque de Artillería se preparen cuatro cañones de bronce, del calibre 24, para remitir a Alicante para su defensa.

-1859. Habiéndose dado varios casos de cólera en Cartagena, la Junta del Hospital de Caridad autoriza al Hermano Mayor para que adopte cuántas disposiciones crea oportunas a fin de que el Hospital haga dentro y fuera de él lo que sea necesario para no negar el auxilio al vecindario, aunque para ello tuviera que vender cuánto posee.

-1862. Por real orden es declarado el puerto de Cartagena, de primera clase, para los efectos sanitarios. 

-1869. En la Plaza de Toros de Cartagena se celebra una corrida, con toros de la Ganadería de Doña Josefa Aguilar y Carriquiri que lidiaron los diestros "Lagartijo" y "Frascuelo".

-1873. El Cantón. Sale de Madrid el general Salcedo, incorporándosele en Chinchilla 700 hombres de la Guardia Civil y Carabineros, dirigiéndose a Alicante por creerla amenazada por los cantonales.

-1879. Se bota en el Arsenal de Cartagena la fragata "Aragón".

-1889. Tiene lugar la primera inmersión (la estática) en el interior de uno de los diques del Arsenal de la Carraca, el submarino ideado por el cartagenero Isaac Peral.

-1907. Tiene lugar la inauguración del Club de Tenis de Cartagena. 

-1926. Nace el futuro escritor Juan Mediano Durán. 

-1966. Se celebra en el barrio de Santa Lucía, la primera edición de los Juegos Florales Jacobeos, cuyo ganador fue el poeta cartagenero José de Jodar Merlos.

-1981. El pleno del Ayuntamiento de Cartagena, por unanimidad nombra a Alberto Colao, cronista oficial de la ciudad.

-2018. El Boletín Oficial de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia, publica el Decreto n.º 175/2018, de 25 de julio, por el que se declara bien de interés cultural el Malacate Minero que se conserva en las instalaciones de la Cantera Emilia, en el término municipal de La Unión.

Estas efemérides se podrán escuchar a partir de las 12,20 en el programa Hoy por Hoy Cartagena de Radio Cartagena Cadena Ser  (91.8 FM y 1.602 OM) y por Internet en la siguiente dirección: play.cadenaser.com/emisora/radio_cartagena/