Rincón Literario de Paco Marín: "La vida borrada de Amalia Finisterre"

TÍTULO:     La vida borrada de Amalia Finisterre

AUTOR:      Emilio Calderón

EDITA:       Algaida (2022)

 

Encuadernación: Rústica con solapas. Tamaño: 15,5 x 23 cm. Número de páginas: 304. PVP: 20,95 €. ISBN: 978-84-9189-706-4

 

Novela dura de leer, mas, imposible de dejar de leer.

Tratamiento impresionante de lo que es el maltrato a la mujer. Gran retrato de lo que puede llegar a realizar un maltratador.

Por otra parte, un final que nos deja con la mirada fija en el infinito.

 

«Amalia Finisterre, una joven enfermera de cuidados paliativos, sufre un brutal ataque en su casa. Golpeada y estrangulada hasta ser dada por muerta, quedará hospitalizada en estado vegetativo, incapaz de comunicarse con nadie.

La inspectora Sarah Toledano se hace cargo de las investigaciones, y aunque todas las sospechas recaen en el novio de Amalia, Matías Almeida, que ha huido precipitadamente a Río de Janeiro, hay algo en el caso que no deja de inquietarle: la ausencia de restos biológicos del sospechoso en la escena del crimen».

Inspirada en hechos reales, La vida borrada de Amalia Finisterre es un relato en forma de thriller sobre el azote de la violencia machista. Una novela trepidante y absorbente que, sin embargo, nunca pierde su profundo y respetuoso carácter de declaración y denuncia.

 

Emilio Calderón (Málaga, 1960) reside en Madrid desde hace cuarenta años. Es historiador, editor y escritor. Se inició en la literatura con la publicación de numerosos ensayos históricos. Posteriormente, y durante diez años, se dedicó exclusivamente a la literatura infantil y juvenil y publicó, entre otros títulos, “Continúan los crímenes en Roma” (Anaya), “Julieta sin Romeo” (Anaya), “El último crimen de Pompeya” (Edelvives) y “El misterio de la habitación cerrada” (Anaya), cosechando notables éxitos con más de un centenar de reediciones de su obra. Su primera novela para adultos, “El mapa del creador” (Roca Editorial, 2006), fue editada después de disfrutar de una beca de creación literaria en la Real Academia de España en Roma y se convirtió inmediatamente en un éxito internacional, publicándose en veintitrés países. Le siguieron “El secreto de la porcelana” (Roca Editorial, 2007), “El judío de Shanghái” (XIIIº Premio de novela Fernando Lara, Planeta, 2008) -traducida al inglés, y cuyos derechos se vendieron en Alemania, Holanda, Rumanía, Ucrania y Croacia-, “La bailarina y el inglés” (Finalista del Premio Planeta, 2009), “Los sauces de Hiroshima” (Planeta, 2011) -traducida al inglés y que cierra su «trilogía asiática»-, “La cosecha humana” (Planeta, 2012), “La biblioteca” (Editores de Zut, 2013), “El velo de Isis” (Ediciones Arconte, 2014), “Círculos” (Stella Maris, 2015) y “Los ojos con mucha noche” (Algaida Editores, 2019). También colaboró en 2014 en tres antologías, “La vida después: cuentos de cine” (Editores de Zut), “Relatos Insólitos” (Ediciones Arconte) e “Imaginaria” (Asoc. Matrioska Fons Mellaria). Dentro del género infantil publicó “El elefante que quería ser hormiga” (Carena Editors, 2012) y “El poeta de Velintonia” (Edelvives, 2020). Entre sus galardones literarios cuenta también con un Micrófono de Plata de la Asociación de Profesionales de Radio y Televisión en 2009 por su aportación al mundo de la cultura; y con el II Premio de Biografía y Memorias Stella Maris en 2016, por la obra “La memoria de un hombre está en sus besos. Biografía de Vicente Aleixandre”, convirtiéndose así en el último biógrafo del poeta y premio Nobel de Literatura.

 

Charlamos con Emilio Calderón para hacer más llevadera la espera hasta que lo tengamos con nosotros en el 11º ELACT… Un placer…

P.- Por favor recuerde quién es Emilio Calderón.

R.- Emilio Calderón es un escritor vocacional, comprometido con la literatura desde hace más de treinta años. Soy una persona que disfruta de los libros, pues creo que en la palabra escrita se encuentra la solución a todas las cuestiones que atañen al ser humano.

P.- Después de escribir "La vida borrada de Amalia Finisterre" ¿la cabeza, bien?

R.- “La vida borrada de Amalia Finisterre” es la historia de un compromiso personal, en tanto que, tras conocer su historia, decidí darle la voz que la violencia machista le había arrebatado. Gracias a su historia, mi “cabeza” está cada vez más comprometida frente a las injusticias que los seres humanos cometen contra sus semejantes. Una sociedad en la que la mitad de sus miembros viven con miedo, no es justa.

P.- ¿Cuándo, cómo y por qué nace "La vida borrada de Amalia Finisterre"?

R.- La novela nace durante la pandemia, después de leer la historia de una enfermera valenciana a la que su pareja intentó asesinar y dejó amnésica. La historia me conmovió y me rebeló.

 

P.- ¿Cómo se ha documentado? Sobre todo, en las cuestiones médicas y sanitarias.

R.- La documentación, en esta clase de casos, por desgracia, no es difícil de obtener. Son muchos los estudios y artículos que hay publicados sobre lo que esconde la mente del maltratador, y lo que opina de su víctima. Crear una relación de dependencia que termine en sometimiento, así empieza todo. Como digo, nuestros medios de comunicación no paran de informarnos sobre casos como el de Amalia Finisterre a diario.

P.- ¿Por qué hay tanto maltrato hacia la mujer?

R.- Es una cuestión de educación, diría que casi cultural, que heredados de los griegos y romanos, y que nuestra sociedad no ha sabido corregir. Solo hay que recordar que durante el franquismo las mujeres no podían tener cuentas bancarias propias. De eso no hace siquiera cincuenta años. Con eso está dicho todo. Han de cambiarse muchos de los postulados sobre los que está construida la educación de nuestros hijos.

P.- ¿Qué está fallando en la educación dentro de la familia?

R.- Las familias cada vez educan menos, por falta de tiempo y también por falta de principios. Creen que a los hijos los educan en el colegio, y no es así. En el colegio te enseñan, te proporcionan instrumentos que tienen que ver con la formación, pero no te educan. Esa tarea corresponde a los padres, y en eso estamos fallando.

P.- El exceso de noticias sobre maltratos ¿puede provocar un efecto imitador?

R.- Seguramente. Siempre se ha dicho que cuando en un pueblo pequeño se produce un suicidio, acto seguido vienen más. Hay un efecto contagio. Es probable que la sobre información esté creando un efecto parecido en relación a los malos tratos.

P.- Todas las mujeres maltratadas, ¿denuncian el maltrato? ¿Cuál es su opinión?

R.- No. Muchas no denuncian por una cuestión de dependencia económica con su agresor. Otras mujeres no son plenamente conscientes de que son víctimas de malos tratos. Es una situación compleja, pero las campañas de apoyo que se están realizando están dando sus frutos. La pedagogía es lo más importante, para que cada mujer sepa cuándo está siendo maltratada y cuáles son los síntomas que ha de vigilar.

P.- Venda su libro ¿por qué hay que leer "La vida borrada de Amalia Finisterre"?

R.- Vender un libro que resta de un caso real de malos tratos no me parece elegante. Lo que sí diría es que la novela es perfecta para tomar conciencia de lo que está bien y de lo que no, de las cosas que una sociedad debe o no permitir. “La vida borrada de Amalia Finisterre” es una novela que persigue la ética mediante la denuncia de un caso de malos tratos que, como todos los demás, no tenía que haberse producido jamás. Como novela que es, hay una investigación policial, y una trama clásica de novela de intriga, con giros y un final inesperado. 

P.- Sus planes a corto y medio plazo ¿son?

R.- Estoy terminando una nueva novela. Pero hasta que no esté lista, prefiero no adelantar nada.