Montanaro: SÁNCHEZ Y EL TEATRO DE LO ABSURDO

Andrés Hernández

SÁNCHEZ Y EL TEATRO DE LO ABSURDO

Ya hace años en esta misma columna escribía del “Teatro de lo absurdo” con la obra “Esperando a Godot” de Becket. Hoy retomo la disciplina dramaturga de lo verdaderamente estúpido basado en un gobierno de soplagaitas, monigotes y desdibujado en un escenario de corrupción y absurdas entelequias ideológicas. Analizando el contexto, creo que se aproxima a un petulante escenario en la Moncloa, una tarima de estupideces adornado en un encerado de manipulaciones informativas gracias a un elenco de actores especialistas en el disimulo, la desinformación y la mentira, cualidades de esa máquina del fango que la izquierda y el sánchismo desarrollan como doctores y catedráticas, pero, en la falsedad y la hipocresía absoluta encuadrada en una suerte de cambalache de influencias y suculentas recompensas.

El teatro del absurdo se basa en obras escritas durante las décadas de 1940, 1950 y 1960. Se caracteriza por tramas que parecen carecer de significado, diálogos repetitivos y falta de secuencia dramática, casi un juego estúpido y absurdo que a menudo crea una atmósfera onírica por alucinada, sorpresa aquí tenemos a Los Chiripitifláuticos de Moncloa, todos identificados, dese el Tío Aquiles, el Capitán Tan, Valentina, la alegre, dulce y fina…, o Locomotoro y claro, los hermanos Malasombra que no es hueva con jamón…, o la Banda del Mirlitón comunista, “Yo soy el bueno, yo soy el malo, yo soy el barbas y yo el de palo, yo soy la luna, yo soy el sol”, y luego las comparsas terroristas y golpistas, todos tienen su protagonismo en esta grotesca representación.

El "Teatro del absurdo" tiene fuertes rasgos existencialistas y cuestiona a la sociedad y al ser humano como protagonistas absurdos de un trasiego social. A través del humor y los mitos, fábulas y leyendas que escondían una actitud muy exigente hacia su representación. La incoherencia, el disparate y lo ilógico son rasgos muy representativos de estas obras, así la similitud, el acercamiento a los disturbios lingüísticos ordenados por el Kaiser socialista de lo absurdo hacia sus súbditos sectarios.

El "Teatro del absurdo" se presenta como el gobierno y las ruedas de prensa que no admiten preguntas y no dan respuestas, una obra sin explicación lógica ni lógica explicación y sin sentido. Se resalta la incongruencia entre el pensamiento manipulado y los hechos, así como la incoherencia entre las ideologías y los actos que es permanente. Los personajes tienen un gran obstáculo para expresarse y comunicarse entre ellos mismos constantemente, no para el público, ante nosotros se retratan como usureros de la verdad o adalides de lo estúpido sin problemas, entre sonrisas e ironías maceradas con insultos, ora Ayuso, ora su novio, ora Feijóo, ora Abascal. En las obras, el decorado y las escenografías al igual con los objetos y los accesorios utilizados de atrezo juegan un papel muy importante como contraste con el contenido de las mismas, excepto donde no las preparan ellos como la Fiesta Nacional o la recepción en la Zarzuela, ahí la cagan demostrando su profunda mediocridad, presentan en sus teatrillos imaginariamente la realidad de los mensajes que se pretenden extender, aunque sean absurdos o mentiras, muy propios del sanchismo, su denominador común.

Ahí está su tropa de críticos teatrales, los que salen en los medios a defender al personaje, buscándole como sea una consecuencia positiva a su ley de amnistía para exculpar a los autores del golpe de Estado y destruir Cataluña. Justifican lo que ayer negaban, como haber llegado a un acuerdo con ERC para investir a Salvador Illa a cambio de una “harmonía solidaria” que reste del Estado más del 20% de sus ingresos y el reparto tributario entre el resto de CCAA. Justifican en el teatrillo que la mujer de Pedro Sánchez, sin título académico, sin oficio pero con beneficio pudiera regir hasta 5 másteres universitarios con dos como prevalencia y, que su hermanísimo reciba contratos millonarios y donaciones paternales y no cotice en España, son capaces de, entre broma y broma, justificar la corrupción de Transportes y Fomento de Aldama, Barrabés y el dúo “bocatonta o pichafacil” de puticlub, Ábalos y Koldo, los mismos que acompañaron en etapas a Sánchez con su Peugeot por España, otra de Godot, Becket y lo absurdo, como dirían en mi calle que da nombre a la columna, viendo la catadura moral de los protagonistas, quizás vagaban de belén en belén, de esos que se iluminan por la noche…

En la obra caricaturesca de la Moncloa se desarrolla un ejercicio secreto de ingeniería legislativa para conceder la salida de la cárcel de los peores asesinos de la historia de ETA y de España, cobardes desperdicios humanos, el cáncer de nuestra democracia hoy, valedores de la legislatura de Sánchez junto con Puigdemont que se ríe de los españoles a cada instante. Lo del fiscal general del Estado lo hubieran desarrollado los mayores cómicos españoles como proeza literaria, Cervantes, Góngora, Baroja o Reverte pero la realidad supera la ficción, todo porque el defraudador es el novio de Ayuso, la bestia negra del sanchismo para gozo de la "fachosfera", en contraposición del embajador en Venezuela Raul Morodo de la izquierda de Zapatero y sánchista que ha robado más de 4,5 millones y llega a un acuerdo con Hacienda de no entrar en la cárcel y pagar 1,4 solo, “negociazo socialista”. Acepta 10 meses de cárcel -no entra- por ocultar ganancias de la petrolera venezolana. La Fiscalía pedía tres años y medio de cárcel y ocho años y medio para su hijo, pero finalmente ha rebajado su solicitud por la confesión de los hechos y el ingreso de 1.400.000 euros, al menos 3 millones limpios, que se sepa.

El matrimonio envuelto en felonías judiciales me recuerda al peronismo kirchnerista, otro matrimonio letal para el país o incluso, a la pareja filipina Marcos, otros dictadores tóxicos, están hundiendo España y ojo, les importa una mierda. Lo de Bonnie y Clyde es de nota. El Ranger de Texas Frank Hamer les dio caza en una carretera de Luisiana. Su final fue tan cruel como su vida, ahí lo dejo. No es una sorpresa que haya sido Pedro Sánchez el mejor en lo peor “the best in the worst”, tan necesario como Luca Brasi para Vito Corleone, y viceversa, quizás alimentándose en la cocina del infierno (Hell’s Kitchen) dónde habitaban en Manhattan.

Sánchez lleva meses, 6 años, fabricando un relato perverso contra la democracia española que garantiza la protección de sus medidas, hasta ahora sin precedentes para salvar su democracia, y a él, de ahí la persecución a los jueces sin descanso, señalar la estigmatización de todo periodista que no sea afín al régimen sánchista social comunista, el desprecio al otro lado del muro, a la oposición y a la ciudadanía crítica contra el sanchismo, bajo los calificativos de ultraderechista, fachosfera, fascismo, etc.…,  y esto muy estudiado y reiterativo para que la masa social comunista apesebrada y subsidiada los jalee. ¡Mira que hay tontos aborregados, más que adoquines! Es la creación de facto de un Estado paralelo, con sus normas y medidas, además de la conversión de las instituciones ajenas al gobierno colonizadas, enfermas y contaminadas a la mística y la liturgia del sanchismo, donde impera, solo la justicia sánchista. Creo que toda esta farsa de indulgencias a los ERES, al Fiscal, a su Begoña, su Koldo y Ábalos, compañeros de correrías son exámenes para un futuro indulto propio por delincuente, malversador, traidor y corrupto, ojo al DAO de la Guardia Civil y las últimas noticias, increíble contaminación de las instituciones que arrasa con todo, nuestra esperanza es la UCO y los jueces independientes con honor.

La inmigración, es su apuesta personal. La dependencia de los inmigrantes a la que nos someten los socialistas y comunistas es una maniobra para perpetuarse en el poder, quieren convertirlos en votos, creo que así se lo creen, que no van a abandonar el poder nunca y eso es un grave problema antidemocrático y anticonstitucional y así, apesebrado el conjunto de la sociedad de izquierdas y muy zurda, ciega, sorda y muda y, a sus órdenes. En esta masa desmedida hay un abismo en preparación laboral y educativa, en cultura y costumbres, equidistantes y divergentes, es una realidad, por eso, la contratación se da solo en explotarlos, los sinvergüenzas se aprovechan de su nula cualificación. Por el contrario. ¿Y si se trabaja en origen y se traen a los verdaderamente preparados con contrato laboral y sin someter a la sociedad a una suerte de presión y coacción? Sería lo decente y lo ideal, ¿no? Pero la decencia no entra en La Moncloa ni en Ferraz. Desde que Sánchez es presidente del Gobierno, hay 621.466 españoles menos y 2.703.938 extranjeros más. Pero si se contaran como inmigrantes a los casi 600.000 hijos de extranjeras que nacieron entre el 1 de julio de 2018 y el 1 de julio de 2024, el balance sería de 1,2 millones de españoles autóctonos menos y 3,3 millones más de población inmigrante y además ilegales en su casi totalidad. No son opiniones, son datos del Instituto Nacional de Estadística (INE) por el coordinador del Observatorio Demográfico del CEU. Y esto es una fuente de escarnio contra nacionales empobrecidos cada vez más y críticos, su polarización, inmigrantes y nacionales, hombres y mujeres, izquierda y derecha, absentistas apesebrados y sacrificados trabajadores para mantenerlos, y los parados, también con IRPF para sacarle los higadillos, este gobierno no respeta ni la pobreza laboral.

El absurdo hecho realidad, al tiempo. Narraban en la prensa y en la RTVE de Sanchez que, llegado Julio del 27. Había una afluencia de periodistas concentrados en un centro penitenciario de Madrid, estos al paso de un grupo de policías escoltando a Pedro Sánchez en el momento de su ingreso en prisión, ¡cáspita! Las preguntas eran al aire y se disipaban en el éter entre el tumulto, Sánchez camina erguido, soberbio y orgulloso, levanta las manos para saludar y enseña sus grilletes dedicando amplias expresiones de afecto al vulgo, es el ídolo de masas. Detractores contra seguidores, una tensión polarizada magnificada, inducida y esperada. Atrás quedaron enfrentamientos como los recordados en el proceso catalán pero recientes hasta su ingreso en prisión.

 Le preguntan, ¿se ha planteado dimitir? La pregunta suena clara. Sánchez se detiene. Tranquiliza a los suyos y a la Guardia Civil. "Un minuto por favor". Por supuesto que no me he planteado dimitir, ¿por qué habría de hacerlo?, esto es un error y se sabrá, soy víctima de la injusticia franquista, de la fachosfera y del complot de la ultraderecha.

Pero declaró hace unos meses que si el caso Koldo, Ábalos y Sánchez le acusaba y lo imputaban e incluso lo sentenciaban dimitiría inmediatamente. Pero claro, la respuesta era otra. El gobierno progresista está más fuerte que nunca. Tenemos un gobierno sólido, los aliados comunistas, terroristas y golpistas siguen ahí, gracias a la sangre y a la delincuencia pervertida se saca la legislatura adelante y eso, a pesar de todos los obstáculos que nos está poniendo la derecha y la ultraderecha, espetaba.

Señor presidente, casi todo el gobierno ha ingresado también en prisión durante los últimos meses. Los Consejos de ministras, ministros y ministres se hacen por videoconferencia, algunos dados a la fuga se conectan con IP´s falsas, todo ello tras los audios y demás pruebas incautadas. La realidad es que se siguen prorrogando presupuestos, no aprueban leyes gracias al veto de sus aliados, con los asesinos en la calle y los golpistas gobernando solo quieren la independencia de España que con usted aseguran conseguirán. Ahora usted afronta unos años de condena. Es la primera vez en la historia que un presidente continúa gobernando desde una celda. ¿No se ha planteado dimitir?

Lo absurdo. Mi ingreso en prisión es la mayor prueba de que el PSOE es un partido tajante contra la corrupción y, sobre todo, que la justicia no está politizada, no como el PP, que se intenta auto indultar. Los socialistas damos ejemplo, aceptamos las decisiones judiciales, no como Ayuso y sus corruptelas o Feijóo que trabaja en una cueva de ladrones en lugar de un despacho honesto. No aceptaremos lecciones de dignidad.

La multitud agolpada en la entrada del penal aplaude desmedida, enarbolando banderas del PSOE y al grito unísono "¡presidente, presidente!". Nada más cruzar el umbral, el pelota de guardia, uno de los pelotas, un tal Bolaños le espeta por teléfono, "Ha estado increíble, jefe. Se ha ganado a toda la opinión pública. Creo que es el momento de convocar elecciones generales para arrasar como en el 23, Tezanos sigue activo y Pumpido nos dará tregua, Marruecos nos apoya y los narcos andaluces también", Bildu y ERC nos necesita y el PNV se vende sin problemas, lo Puigdemont lo resuelven Santos y Delcy. Ojo al dato de la fecha, si esto pasa en julio del 27 es que no hay elecciones convocadas, ojo que, o se le encausa o ya veremos.

El teatro de lo absurdo, ficticio sí, han hecho gags cómicos sobre el asunto en innumerables ocasiones, pero, no olvidar que la realidad puede superar la ficción, y de hecho lo hace, y por absurdo no es descartable, estamos en España, somos campeones en desarrollar la estupidez, luego votamos a la derecha para que lo solucione, pero mientras, hacemos el idiota sin sonrojarnos.

 

Andrés Hernández Martínez