CUESTE LO QUE CUESTE, LAS PENSIONES SE DEFIENDEN, artículo de opinión de Enrique Jesús Nicolas

CUESTE LO QUE CUESTE, LAS PENSIONES SE DEFIENDEN

Cartagena 11 diciembre 2020 Enrique Jesús Nicolás Paredes

Durante el pasado mes de octubre y en los próximos meses, los pensionistas y futuros jubilados, viviremos con un sosiego, esperando las deliberaciones de la comisiones del

Pacto de Toledo. En las mismas se juega nuestro futuro y el de futuras generaciones.

Una de las recomendaciones que desde mi punto de vista y el de muchos de mis compañer@s, nos parecen más lesivas, es el de seguir manteniendo, la penalización a todos aquellos jubilados, con 40 años o más cotizados a la Seguridad Social, que deciden prejubilarse antes de los 65 años.

Más del 40% de los nuevos jubilados españoles abandona el mercado laborar antes de tiempo, es decir, antes de cumplir los 65 años, la edad legal para los que tienen largas carreras de cotización.

Casi uno de cada cuatro nuevos pensionistas ha sufrido este año un recorte en su prestación a causa de adelantar la edad de retiro, recorte que previsiblemente será

mayor cuando se ponga en marcha la medida anunciada por el ministro Escrivá, que pretende que por cada año de adelanto se reduzca la pensión un 8% real.

Pero no todos los que adelantan su jubilación lo hacen por voluntad propia. Más del 12% se vieron obligados a ello el año pasado, por haber sido objeto de un despido colectivo.

Mayor es el porcentaje de los que deciden jubilarse antes de los 65 años: un 16% en 2019, nivel que se eleva hasta el 18,5% este año. Esto supone que las jubilaciones anticipadas voluntarias se han duplicado con creces desde 2013, año en que se aprobaron, cuando apenas representaban el 7% de todas las altas.

Las recomendaciones de la Comisión del Pacto de Toledo contemplan, entre otras cosas, la necesidad de un acercamiento gradual de la edad real de jubilación a la edad teórica, desincentivando las jubilaciones anticipadas, generando en la práctica una grave injusticias, especialmente si hablamos de la realidad de personas que comenzaron a trabajar muy jóvenes y que han cotizado ya más de cuatro décadas.

En las últimas semanas, estas situaciones han tenido presencia en el debate público merced, sobre todo, al impulso de algunas asociaciones como ASJUBI40 (Asociación por la Defensa de la Jubilación Anticipada sin Penalizar con más de 40 años Cotizados), y a la aprobación de mociones de apoyo en algunas asambleas autonómicas, y ayuntamientos de todo el estado.

Conforme a la legislación actual, a los trabajadores que se jubilan anticipadamente –

de modo voluntario o forzoso – se les aplican unos coeficientes reductores a la hora de calcular la cuantía de su pensión que varían según los casos, pero que suponen una

disminución que oscila entre el 6 y el 8 por ciento por año. Cuando estamos hablando de trabajadores que han tenido largas carreras de cotización, de más de cuarenta años. Una penalización que, además, no acaba ni se detiene cuando el afectado alcanza la edad de jubilación, sino que se mantiene durante el resto de su vida, como una condena.