PENSANDO EN VOZ ALTA: HIPOCRESÍA REPARTO QUE PARA MI NO TENGO
PENSANDO EN VOZ ALTA
HIPOCRESÍA REPARTO QUE PARA MI NO TENGO
La vacunación contra la Covid-19 está sufriendo unos movimientos más propios de una montaña rusa que de un transitar reposado y tranquilo de quien sabe lo que hay que hacer. Habrá retrasos. Quedarán personas sin vacunar temporalmente. Habrá gente que se vacune, aunque no le corresponda… Por otra parte, hay algo que llama la atención; me imagino que ocurre lo mismo en todas las Comunidades; tal es la noticia que publicó el diario digital “Público” (25/12/2020): «Todas las personas que se vacunen contra la Covid-19 en la Comunidad de Madrid tendrán que firmar un consentimiento informado. La autorización tendrá que ser rellenada con los datos de identificación del paciente, que dará su consentimiento para ser vacunado». Veamos, yo cuando me vacuno cada año contra la gripe no tengo que firmar nada, me imagino que usted amable lector tampoco, porque la vacuna está más que probada y desarrollada. Uno firma y da consentimiento cuando se presta voluntariamente a ser ‘conejillo de indias’ en una vacuna o medicamento que aún no está completado totalmente y, además, cobra un dinerillo.
¿No están las vacunas confeccionadas al cien por cien en la totalidad de sus fases correspondientes? ¿Por qué ese afán de buscar vacunas para la cuasi totalidad de la población mundial y no medicación para menos del 1 % de enfermos del mundo? Reitero: ¿Es seguro vacunarse?
Algunas de las personas (cargos políticos, fundamentalmente) que se han vacunado “colándose” o “sin tocarle”, por mor de distintas campañas mediáticas, han dimitido de sus cargos y puestos, pregunto: ¿por qué? Hago esta demanda porque el pasado mes de octubre, del 2020 lógicamente, ocurrió algo en la Región de Murcia que, parece ser, a nadie le ha llamado la atención o se le ha distraído convenientemente para que no hiciese mucho ruido… Me refiero a la vacunación de la gripe de sus “señorías” de la Asamblea Regional de Murcia (sita, por cierto, en el Paseo de Alfonso XIII de Cartagena). No hubo mucho ruido, pero el diario digital “El Español” (22/10/2020) se hizo eco de la noticia, resaltando lo siguiente: «170 pacientes de riesgo se quedan sin vacuna de la gripe en Murcia al destinarse a los diputados».
En esos días yo sufrí dos retrasos, en mi vacunación, por falta de vacunas (14 de octubre y 10 de noviembre). Vacunándome definitivamente el día 20 de noviembre. Al igual que yo, otras tantas personas lo padecieron. Pero si el miércoles 20 de octubre estaban citados 170 pacientes de riesgo, en la nevera sólo había 80 dosis. Dosis previstas para los diputados y personal de la Asamblea Regional.
Sé por este medio y por información de primera mano que los enfermeros se negaron a desplazarse al Hemiciclo el miércoles 21 de octubre, porque les parecía vergonzoso. Hago un alto y pregunto: ¿por qué cada uno no se vacunó en su Centro de Salud correspondiente? ¿por qué permitieron que otras personas se quedarán ese día sin vacuna? Sé el bochorno que supone el que te tengan que llamar para decirte que no vayas porque, aunque te corresponde, no hay vacuna…conmigo, la señora que me llamó las dos veces se disculpaba con rabia contenida, más, era una mandada. Parece ser que hubo una orden directa de la Consejería comunicando que esas 80 dosis que se habían recibido y estaban en la nevera eran para los “señores políticos y demás personal de la Asamblea Regional”. Ya he indicado más arriba que los enfermeros se negaron a ir después de que se les exigiera desde dicha Consejería. Movida hubo. Teléfonos sonando sin parar y echando humo, también. Llamadas al más alto nivel y poltronas que empezaban a removerse. Pero a pesar de la negativa, y de muy mala gana, los enfermeros accedieron a ir a la Asamblea.
Por otra parte, todo esto se filtró al, ya citado, diario “El Español”, los WhatsApp de los enfermeros llamaban de todo a los representantes del pueblo, fueran del color que fueran. Aquí va una captura de uno de los mensajes: “A lo mejor ser político de la Asamblea es ser un grupo de muchísimo riesgo”.
Por supuesto que hubo revuelo en el SMS, hubo mosqueo y temor a que empezaran a rodar cabezas. Alguno tuvo que contraer glúteos para no rilarse pata abajo. Nadie dimitió como ahora ¿por qué? Al cabo de un mes cesaron a traición a una Jefa de Enfermería. Pero en la política ningún cese, me imagino que alguno de los que ahora se han puesto tan dignos pidiendo ceses y dimisiones se vacunaron, sin corresponderle, de la gripe. Esos son los que van pregonando hipocresía reparto que para mí no tengo.