Montanaro de aquí: LA TRAICIÓN A UN PACTO, AUNA CIUDAD Y A UNA REGIÓN

Curiosamente, todo lo que huele a izquierda también huele a populismo barato, y sobre todo a traición, estamos atacando sin rubor a lo que, unos indocumentados analfabetos y sinvergüenzas de talonario y casoplón han decidido llamar ultraderecha y, es más, lo hacen después de asociarse con despojos humanos como son los filoterroristas de Bildu y pretenden con 52 diputados hacer escarnio de VOX como ultraderechistas para ilegalizarlos por que los temen, -ese es el objetivo- y ellos, sin vergüenza ni rubor, se hacen llamar comunistas. Hay que recordar que deberían de sentirse avergonzados por ello y para ello Europa lo sentenció, un ataque a los totalitarismos comunista y nacional socialistas europeos, estos últimos para los iletrados comunistas que abundan, son los nazis, sí, Europa no separa a comunistas de nazis ¿es que los comunistas enlistados en miles de siglas son mejores que los nazis?, ¿quién quema las calles?, todos estos imbéciles que queman las calles son delincuentes, menas, inmigrantes, radicales de izquierdas, CDRs, Kaleborroka y ultras, claro que, sin beneplácito de nadie excepto los de izquierdas que cumplen con la doctrina comunista, y en Cartagena también, a pesar de los dislates demagógicos de la “representanta” podemita, un verso que debería estar avergonzada clamando protagonismo barato en un desierto de lo absurdo de la filosofía podemita. Lo cierto es que, y de esto las hemerotecas son testigos, hasta que algún imbécil las queme, ¡ah no!, solo se pueden borrar con injerencia gubernamental y el silencio cómplice de los medios de comunicación comprados y sobornados. Las traiciones son una máxima de la izquierda y aquí me quedo, con la Castejón, heredera de la felonía de su partido, el PSOE desbaratado y narcotizado de Cartagena, y así sigue, con sus jinetes de comparsa, los que echaron y los que están, al igual que hicieron con López, harán con la Arroyo, y un Partido Popular condenado al ostracismo de su incompetencia y estupidez, de su amansamiento político y de su sumisión electoral, un partido caído en desgracia por su descarado nepotismo familiar regional y congoja local.
El que se las da de socialista acaba traicionando y ese es el decálogo de estos fariseos de la gestión, también de los voceros populistas locales, que requieren lo que no hicieron, y eso es otro hecho, no una opinión, ya vemos lo que está haciendo Sánchez en España, su última gesta despreciar a toda una nación ignorándola en una excepcionalidad como es el estado de alarma, se la trae al fresco, está él, después él y luego él y detrás los perroflautas y demás impostores, pues aquí pasa algo igual, con la Castejón o López Miras, que en la vida la han visto más gorda, se suman al minuto de protagonismo de los abrazafarolas de Ciudadanos y sumergen a la ciudad y a la región en un estado de empobrecimiento virtual con final trágico real.
La traición es inherente a los pactos políticos. Son dos caras de la misma moneda. Por eso, no creo equivocarme si aventuro que algún concejal haciendo la cama -traición- a su jefa romperán los acuerdos con la derecha cartagenera en primavera y retomarán su reincorporación al PSOE de Sánchez y Diego Conesa como héroes, viven entre traidores, es natural. Pactos y traiciones los ha habido siempre, de eso sabe MC, aunque en dos años, yo, ignorante donde los haya, además del submarino en la entrada por Alfonso XIII, no sé qué han hecho…, poner a sus congéneres e ineptos colegas en puestos de relevancia, joder lo que funcionaba en el Consistorio, descabezar servicios y entes como la Policía Local de lo que aún no se han recuperado, y holgazanear con algún que otro inmueble, legal pero amoral como la fonda del sopapo de Cuatro Santos o la cárcel de San Antón, bueno, y la bandera roja de la Atalaya rememorando el Cantón, por lo menos no izaron la turca como Antonete.
Lo único que demuestran todos estos pactos políticos y su previsible incumplimiento no es más que oportunismo, guerra de intereses de unos y otros y, sobre todo, inestabilidad. Por eso, de aquí a poco, veremos mociones de censura en muchos Ayuntamientos, cambios dramáticos de alianzas y amigos que dejan de serlo mientras que otros se convierten en amantes de fortuna política a base de conveniencia mutua.
Los logros de este gobierno social popular en Cartagena son el desenfreno en la “nada”, los inmuebles modernistas emblemas de la ciudad siguen como despojos ruinosos, el palacete de los deportes sigue en ascuas, el desarrollo urbanístico en torno a la rambla es de dudosa correspondencia de la que la Castejón en algún momento dará cuenta, desarrollo del mismo con un futuro paralelo al pico esquina de la carretera de acceso, ya podemos ser idiotas en esta ciudad. La injerencia de la Castejón en las elecciones sindicales municipales al más puro estilo sánchista o tramposo ha sido manifiesta y denunciada, mientras, los comerciantes locales ahogados por el virus chino y el de la incompetencia gobernante, los autónomos desapareciendo y llenado colas del hambre y el Mar Menor abandonado, La Manga desamortizada, llena de mierda como el resto de la ciudad Departamental y la excusa es el virus de la vergüenza para ocultar la incompetencia de este gobierno de telenovela.
Y en la región la desvergüenza es notoria, un López Miras que es absentista total del ingenio, a pesar de la venta informativa de Puertos del Estado sobre el Plan de la Autoridad Portuaria de Cartagena, con una inversión prevista de 344 millones de euros es humo, se habla de la posibilidad…, de una nueva terminal para contenedores de mercancías de Escombreras cargándose el anti electoral desarrollo del Gorguel, y reformar la fachada marítima con gotelé, del AVE como de Portman y su regeneración olvidaros, habrá que vigilar las cuentas, lo cierto es que semanalmente las pateras se cuentan por decenas y los inmigrantes ilegales magrebíes y argelinos por cientos y no son lo mejor de cada casa, solo hay que darse una vuelta por Cartagena y sus barrios colindantes, por el campo de Cartagena y comprobar la islamización que silenciosamente y con el beneplácito, por omisión de las autoridades se está desarrollando, sin contar las agresiones violentas por menores indemnes y libres de responsabilidades, ¿Inseguridad? Usted mismo.
Pero la vergüenza más grande destapada por esta pandemia es la necesidad de reestructurar los territorios de esta región, un reino de taifas en manos de los capitalinos murcianos medievales, políticos de tres al cuarto que llevan décadas menoscabando los recursos de toda la región. No sé exactamente el Noroeste de la región como se define, y resto de ricas extensiones, sí sé, sabemos, que la comarca de Cartagena necesita una independencia territorial de la región, debe acabarse el delincuente menudeo económico, político y judicial con el territorio. El desarrollo de la provincia debe ser un tema determinante, si hubiera vergüenza en la Asamblea Regional, que no la hay y así mismo, la reestructuración de municipios, el Mar Menor ha de ser una entidad municipal independiente de Cartagena y San Javier, es la única manera de potenciar su desarrollo, hasta la fecha está prostituido por los intereses de dos ayuntamientos que los sangran a cambio de la nada, son los propios lugareños y los empresarios locales los que han luchado siempre por su desarrollo, además en la más absoluta orfandad política, es la gallina de los impuestos a modo de huevos de oro de San Javier y Cartagena. Es el vellocino de oro de Cartagena y de San Javier y ha de conseguir la secesión de tanto proxenetismo, la última estupidez ha sido la frontera vigilada ente municipios, a veces pienso que no cabe un tonto más en esta región, pero también que sobran listos con sueldazos de las listas electorales.