Opinión

Montanaro: ¿VERGÜENZA O DESVERGÜENZA INSTITUCIONAL?

Montanaro: ¿VERGÜENZA O DESVERGÜENZA INSTITUCIONAL?

¿VERGÜENZA O DESVERGÜENZA INSTITUCIONAL?

En este país casi todo está permitido. Aquí, los de mente deslucida, los tragaldabas tienen su sitio y posiblemente por delante del pueblo llano y trabajador, hace ya años que se instauró un oficio aséptico, lo que se conoce como el oficio político, que no politólogos, únicamente la recomendación de turno es el aval necesario para su desempeño, otra cosa es lo que se haga.

De esta forma vemos, como un ejemplar pueblo español es vacilado y ninguneado por los iluminados en Cataluña y amancebados por un Sánchez y un gobierno de cantamañanas a sueldo y bonanza, traidor y embustero. La concordia, la utilidad pública, en su vida ha vivido en la concordia, si en la manipulación este falso presidente mendigo de saludos e indigente de dignidad. La utilidad pública, la única es su salida inmediata del gobierno y la vuelta a una Constitución que está mancillada y contaminada con provocaciones institucionales.

En espartana microcirugía reparadora que pretende justificar con indultos a ladrones y sediciosos golpistas, la incompetencia va a suturar poco las heridas causadas por esta metástasis política que es, el abuso de autoridad autonómica y el enriquecimiento de los dirigentes catalanes, a costa de la salud, el trabajo y el bienestar de 7 millones de moradores de las provincias de Cataluña y “allende” las fronteras provinciales, ¿se acuerdan? Barcelona, Gerona, Lérida y Tarragona. Y sobre todo con una respuesta sumisa y cómplice del gobierno de España, lo pagará en las urnas, a pesar de que ya pocos tontos tienen cabida en España, estamos al completo. Máxime por el efecto contagio con el País Vasco y otras comunidades que se creen el culo de España, los terroristas y asesinos de ETA y sus correligionarios de Bildu y PNV ya piden el blanqueo de los asesinos y su salida de la cárcel, justificando sus asesinatos, increíble, y con estos mamarrachos y miserables gobernando, cómo no vamos a ser los idiotas de Europa que ya, hasta marruecos nos ningunea y los letones nos vacilan.

Cuando vemos a los representantes políticos en el parlamento nacional o en el propio albero catalán, nos sorprende como pueden llegar a estar viviendo del cuento impunemente bajo la frustrada y estéril señera, bueno están también los sánchistas viviendo del cuento, y siguen jodiéndonos los dos, y siguen en su mundo de papel pinocho, y son los menos agraciados en todo, intelectualmente está  a la vista y en más tristes aspectos…, pero como decía mi madre, a todos los tontos les da por lo mismo, robar y jodernos. Robar, y para muestra el botón del clan Pujol, sinvergüenzas con marchamo catalán, como aquél chorizo de antaño que comprabamos en la tienda de barrio para el bocadillo. Tras ellos, sus heraldos, ERC y demás..., amparándose en su frustración independentista, donde se creen todavía, en el siglo XXI, que mantienen un feudo como en el medievo, estanco y particular -alguno hasta el derecho de pernada-. Y yo me pregunto, ¿cómo es posible ver el rosario vergonzoso de personajes del teatro de lo absurdo catalán, y seguimos aguantándolos…? Miedo, ineptitud, torpeza, incapacidad y sobre todo incompetencia, de todo un poco, mientras nos sacuden a impuestos y recortan derechos y libertades, mientras nos ahogan en nuestra propia bilis, donde nos vacilan atenuando las mascarillas tomándonos por gilipollas, que debemos de serlo, y atragantados todos por la Constitución y eso no es justo para los españoles.

La “república independiente de Cataluña” me suena a un eslogan mercantil, a IKEA, idiotas, donde solo falta para escenificar el anuncio televisivo una silueta del Sr. Carlos Puigdemont o Pedro Aragonés y su grupo de colegas de bar en un felpudo, otrosí en breve podríamos ver al nuevo partido creado por Ibáñez sarcásticamente a modo de cómic, porque al final se traduce en una tragicomedia con tintes de personajes del TBO, hagan un ejercicio de fisionomía…

Tengo claro que el sostenimiento encubierto de estos malversadores, delincuentes y estafadores por Sánchez y su reata de filibusteros y filibusteras y filibusteres, estos los más tontes de la butifarra huidos y cazados, presos y recelosos, y podemos aburrirnos en citar prevaricaciones y corruptelas en Cataluña, y más acá, son estudiadamente desarrolladas a costa de los currantes catalanes, todos, tanto los de pata negra, si quedan…, como los charnegos, sobre todo que diría Paco Candel en sus “Otros catalanes” sufren el alocado y frustrado process, eterno, cansino, estúpido, odioso...

Estos son los delincuentes del Palau, de las ITV´s, del 3%, y un sin fin de estafas del porro y la chancla, del flequillo y la coleta con barretina, las de los burgueses del caganer y la chistorra que han vivido como parásitos y viven de su entramado mezquino y filibustero, y me pregunto como todavía les siguen aguas algun@s ¿ciegos?, ¿sordos?, ¿o simplemente tontos? No tengo ninguna duda de que en su mezquindad está su cobardía, todos pensábamos que en el momento que se les prenden, se les arresta, se les somete a la lenta y esquiva Justicia española, se les acaba la tontería. Pero no contábamos con Sanchez y su traidora utilidad pública para consumar su propia utilidad presidencial.

 La pomada al final se seca o se acaba de tanto usarla, como el amor y la comprensión, y el Gobierno está siendo demasiado holgazán y descuidado con estos cacos de postín, ladrones de guante blanco entrelazados en la democracia con lazos amarillos y almorranas petulantes, gentuza, porque son dictadores de la arrogancia y autócratas de la mentira, están sometiendo al pueblo catalán a penurias y recortes vitales para sus sistemas capitales y, a una sumisión medieval, una innoble tardo burguesía catalana, una tropa sin dignidad alguna que no tienen pudor en dejarse hacer vejaciones por los antisistemas, por los anarquistas “rompe-todo” y tentetiesos, tunantes que hacen de su propia ignorancia y falta de dignidad su negocio social. Y ahora con Sánchez y su gobierno cómplice con lo que esto supone para la dignidad de un pueblo como el español, condenado al ostracismo y la ruina.

 He leído que; “La vergüenza es una sensación de ridículo y desnudez psicológica o moral, un sentimiento desagradable y humillante, que provoca remordimiento de conciencia y miedo a perder el aprecio y el respeto de los demás. Cualquier persona “normal” experimenta vergüenza si es sorprendida en falta o cometiendo una acción indecorosa, si se descubre que su actitud es “hipócrita” o que su conducta es reprochable, ilegal o “inmoral”. De ahí, que la vergüenza constituye un importante regulador del comportamiento social, un freno contra la deshonestidad y un indicador de calidad humana”. Creo que está todo dicho. La vergüenza es la “ajena”, la que sentimos los españoles por tanto ridículo menstrual catalanista que no catalán. Porque en Moncloa tampoco se aloja ni la vergüenza ni la dignidad, solo el ridículo…

 

Andrés Hernández