Rincón Literario de Paco Marín: “El alumno inquietante”
TÍTULO: El alumno inquietante
AUTOR: Alonso Curiel
EDITA: Apache Libros (2021) -Noir-
Encuadernación: Rústica con solapas. Tamaño: 14,5 x 21 cm. Número de páginas: 132. PVP: 14,00 €. ISBN: 978-84-123828-3-9
De nuevo una novela corta, 132 páginas, me ha llenado más que una obra más extensa. Novela en la que se condensa muchos de los ánimos que nos adornan a los mortales: Venganza, peso del pasado, consecuencia de los actos, reflexiones vitales, el amor, la soledad… De todo esto se trata en las varias historias que sobrevuelan sobre al lector.
Seis personajes; bien por parejas como ‘Martín y Pablo’, ‘Julia y Ernesto’ o individualmente, como Elías y Carmen; son los que llevan la voz cantante al tiempo que desgranan las distintas pasiones. Una de estas parejas, Martín y Pablo, a través del forzado diálogo llega a inquietarnos y, en muchos momentos, nos revuelve las tripas -fundamentalmente Martín-. Todo envuelto en un paisaje de esas tierras olvidadas y despobladas en las que oír hablar de ‘eutanasia’ te hace saltar del sillón de lectura.
«Valladolid. Nochebuena de 2017. Un viejo profesor de literatura jubilado viaja en coche a un pueblo cercano a Valladolid para pasar lanoche con su hija y su yerno.
Cerca de su destino, la intensa niebla reinante le hará detenerse en la carretera.
Un coche manejado por un escritor de novela negra se detiene a auxiliarlo. El conductor pronto reconocerá en ese anciano a su viejo profesor.
Lo que parece ser un encuentro feliz, pronto se convertirá en una inquietante situación por un trágico suceso que ocurrió en el pasado».
En definitiva: no se puede decir más y de una manera tan intensa en 132 páginas. Novela totalmente recomendada
Jorge Alonso Curiel (Valladolid, España, 1975). Licenciado en Filosofía y Letras, es escritor, profesor de Literatura Española y ejerce también la crítica cinematográfica y literaria en varias revistas.
Autor del poemario "Es Mejor el Sueño"(2007); de la novela breve "Las Guerras han Terminado" (2011); del libro de relatos eróticos "Tu Mejor Pecado" (2011); del conjunto de relatos y microrrelatos "Yo Conocí a un Hombre Satisfecho" (2012), publicados por la editorial neoyorquina Babel Books Inc. También participó con varios cuentos en el libro "Mujeres" (2011), y con un diario ficcionado en "Yo a la Crisis la Guiso y me la Como" (2012), publicados también por Babel Books Inc. En 2013 publicó, en la misma editorial, una edición del clásico de la literatura española "El Lazarillo de Tormes", y el libro infantil "Paisaje de Risas", escrito a cuatro manos con la escritora mexicana MaríaRobles Echeverría.
En mayo de 2016 publicó "Saber Moverse", un libro de relatos en la editorial Atlantis. Y en octubre salió a la venta, en la editorial Playa de Ákaba, su segundo poemario "Reflejos en el cristal cotidiano".
En noviembre del mismo año salió a la venta la antología de relatos "Pucela negra y criminal" (M.A.R. Editor), en la que participa con una historia criminal ambientada en un conocido barrio de la capital vallisoletana.
En 2017 apareció su primer trabajo como antólogo de relatos con el libro “Los bares tienen corazón” (Playa de Ákaba). También publicó el libro se relatos “La noche del escaparate” (Ediciones Atlantis); y participó con el relato “Los demonios de las lluvias de octubre” en la antología “Kalpa III. Relatos satánicos” (Apache Libros).
En 2018 participó en la antología "Castilla, puerta de la Historia" (MAR Editor); y en septiembre del mismo año apareció el libro de relatos “Media hora” (Apache Libros).
Durante 2019 participó en dos antologías solidarias: "Equilibrar los tiempos" (TarQus), y en "Ella" (Ayuntamiento de Valladolid).
En 2020, Ediciones Vitruvio publicó su tercer poemario "Las Manos del Sueño".
En 2021 apareció la novela negra titulada "El Alumno inquietante" (Apache Libros).
Ha resultado ganador y finalista en incontables certámenes literarios.
En las tierras vallisoletanas departimos con Alonso Curiel… Un placer…
P.- Por favor, presente a Jorge Alonso Curiel.
R.- Un escritor vallisoletano que nace en 1975 y que ha escrito y escribe en casi todos los géneros. Un escritor de vocación que respira literatura por todos sus poros, con doce libros publicados, que ha ganado algunos premios y que, además, ejerce la crítica cinematográfica. Un letraherido, y un herido también por el cine.
P.- ¿Cuándo, cómo y por qué nace "El alumno inquietante"?
R.- La imagen inicial, de donde surge todo, fue la de un anciano profesor de literatura jubilado pidiendo auxilio al lado de su coche, en una carretera comarcal que conduce a un pequeño pueblo castellano, y envuelto casi en la niebla en el atardecer del día de Nochebuena. A raíz de ello, comienzo a crear una historia en la que los temas de la venganza y el peso del pasado van a ser cruciales, ya que aparecerá alguien en la carretera que ayuda a este viejo profesor y que no es otro que un antiguo alumno ya cincuentón que se ha convertido en un escritor de éxito de novela negra. Pero hay muchos temas más en la historia.
P.- ¿Cómo se ha documentado?
R.- Consulté muy pocas cosas. No necesité apenas consultar porque los datos objetivos que aparecen en la novela los sabía de antemano. Todo lo demás es ficción.
P.- ¿Cuánto hay de usted en Martín y Pablo?
R.- Martín, el viejo profesor, es un hombre conservador que vive ya en el pasado, y que parece que tiene muy pocos escrúpulos con los fallos que cometió en su vida; es alguien que no permite que sus errores le amarguen su presente. Pablo, el escritor de éxito de novela negra, es un hombre atormentado, descreído, que posee una alta idea de la justicia, que pone en cuestión todo lo que hace o lo que ha hecho; es un ser complejo que no olvida lo vivido y tampoco sus errores; es un inadaptado, y solo en su oficio y en el territorio de la ficción se siente tranquilo. Todos tenemos algo de los dos en mayor o menor medida.
P.- ¿Qué opinión le merece la eutanasia?
R.- Es uno de los muchos temas que aparecen en el libro. Entiendo y comprendo todas las posturas acerca de ello, pero como no proceso ninguna religión e intento siempre reflexionar y actuar desde la objetividad, pienso que la eutanasia es una solución a ciertos casos. No se trata de matar a nadie, se trata de ayudar a morir de la forma más digna posible a alguien querido.
P.- ¿Recuerda con especial cariño a algún profesor suyo? ¿Llegó a odiar a alguno... hasta el extremo de querer verlo muerto?
R.- Recuerdo a un profesor de literatura en BUP que me ayudó a amar la literatura. Se llamaba don Arturo. Creo que fue quien iluminó los primeros tramos del camino de la literatura, del que fue y es el camino de mi vida. ¿Si he odiado a alguno? Tengo que decir que no. Tampoco deseé la muerte a ninguno de ellos, aunque es verdad que, en algunos, por fortuna muy pocos, vi actitudes soberbias, e incluso déspotas, que no me gustaban nada y que me parecían reprobables, pero ninguna como las que aparecen en la novela, que son muy duras. Pasado el tiempo, aquellas actitudes y aquellos pocos profesores me provocan lástima. Bertolt Brecht decía que las personas son malas porque son infelices. Quizá lo fueran ellos.
P.- A su juicio, ¿cómo influye el pasado en el presente de una persona?
R.- La verdad que admiro a todas esas personas que, como don Pablo, el viejo profesor de la novela, parece que lo vivido no influye en ellas. No sé cómo se puede lograr esto. Somos lo que hemos vivido, leído, amado, etcétera, y para que lo vivido no repercuta en nosotros, hay que ser tan duro como una piedra. Somos seres humanos, seres emocionales, y es muy difícil tapar las rendijas por las que aparecen, por ejemplo, el remordimiento, o la culpa, o el arrepentimiento. Ser humano significa pensar en lo vivido, reorganizar la experiencia, y es casi imposible que el pasado no esté en nuestro presente. Somos memoria, memoria que avanza en la bruma, como decía Luis Cernuda, y tiene muchísima importancia.
P.- ¿Cómo le gustaría que le recordaran... en el futuro?
R.- Como una persona que recorrió al máximo su propio camino, disfrutándolo, y que no es otro que el de la literatura. También como alguien que ayudó sin condiciones a su gente cercana.
P.- ¿Cuáles son sus géneros y autores favoritos?
R.- Me gustan todos; con todos disfruto y de todos aprendo. Quizá la novela histórica es la que menos leo porque mi preocupación como lector y escritor es el mundo moderno, el mundo actual. Tampoco frecuento mucho la novela de fantasía, pero ya digo que todo me interesa si me engancha. ¿Mis autores favoritos? Creo que son todos aquellos escritores que conciben la literatura como una herida esencial, con historias y personajes tan llenos de vida y conflicto que logran que acabes la lectura siendo otro. Son escritores que consiguen atrapar la vida y trasmiten verdad, que resultan muy cercanos, con un estilo sencillo y sobrio, al mismo tiempo que tienen el don impagable de ser amenos. Raymond Carver, Charles Bukowski, Pío Baroja, Stevenson, Juan Rulfo, Ernesto Sábato, Heminway, por ejemplo; poetas como Pessoa, los Machado, la poesía clásica china, el cancionero español, Luis Alberto de Cuenca, Eloy Sánchez Rosillo, Karmelo C. Iribarren, y tantos otros.
P.- Como lector, se decanta por: ¿libro electrónico, papel o audio libro?
R.- Tengo predilección por el libro en papel. Se logra una mayor conexión e intimidad con la historia y los personajes. Pero también leo, aunque menos, en libro electrónico, y también escucho audiolibros. Todo debe convivir en armonía, ya que cada formato responde a las necesidades y a los deseos de los lectores.
11. ¿Qué está leyendo ahora mismo? Recomiende, por favor, un par de títulos.
R.- Suelo leer varios al mismo tiempo. En estos momentos estoy releyendo varios libros: mi relectura anual de “El Llano en llamas”, de Juan Rulfo; “Metanoia”, de Dioni Arroyo, una historia distópica llena de fuerza y de temas para reflexionar; y la poesía completa de Eloy Sánchez Rosillo. Me habéis pillado en un momento en que estoy releyendo; cuando acabe estas, me pondré con novedades editoriales.
P.- ¿Qué manías tiene a la hora de escribir?
R.- Prefiero la noche, la madrugada para escribir, y hacerlo en el campo acompañado de la radio de fondo, en una casita que tengo en un pueblo cercano a Valladolid. La mañana y la tarde, el día, en definitiva, están hechas para otras cosas. Decía Bukowski que de noche nace el misterio, y la literatura es misterio; capta y refleja el misterio. Si no puedo irme al campo, lo hago en mi estudio de mi casa en la ciudad, y sin ninguna manía en especial, salvo la radio siempre de fondo.
P.- Relate alguna curiosidad literaria personal que le haya ocurrido y no ha contado hasta ahora... si la hubiere.
R.- Una vez, en la presentación de una de mis obras en 2017 en Valladolid, del libro de relatos "La Noche del escaparate", mientras estaba contestando a una de las preguntas del presentador, vi que un hombre del público se levantó y se acercó discretamente a la mesa donde estaban los ejemplares que después se iban a vender. Sin ninguna vergüenza cogió uno y me miró sacando su pulgar hacia arriba al mismo tiempo que asentía con la cabeza. Y se fue corriendo con el libro; parecía tener verdadero interés en él. Lo robó y nadie se dio cuenta. Yo se lo hubiera regalado, no era necesaria aquella acción. Contaría alguna más, pero sé que no puedo extenderme.
P.- Venda su libro, ¿por qué hay que leer "El alumno inquietante"?
R.- Aquellos que han leído la novela y me han hecho llegar su opinión, dicen que es una historia de intriga, intensa, que engancha desde el primer párrafo con su estilo sencillo, con personajes tan complejos como llenos de vida, que reflexiona sobre muchos temas como la venganza, el peso esencial del pasado, el oficio de escritor, la utilidad de la literatura, la eutanasia, el amor y el desamor, el despoblamiento de nuestras zonas rurales, la soledad, la incomunicación, el irremediable paso del tiempo o la confrontación de los sistemas educativos del pasado y del presente, y que cumple su objetivo también de emocionar y entretener. Algunos me han dicho que es una novela que no quieres que acabe.
P.- ¿Cómo ha convivido con el bichito Covid-19? Sus planes a corto y medio plazo ¿son?
R.- En el confinamiento pensaba que escribiría mucho porque encerrarse para disfrutar de su oficio es lo que busca y hace todo escritor, pero me costó hacerlo ya que las noticias que llegaban de la pandemia eran desalentadoras y me influía en el ánimo. Escribí mucho más en las dos últimas semanas del encierro.
¿Mis planes? No concibo la vida, mi vida, sin escribir, sin entenderla a través de la literatura y del cine. Escribo a diario, y ahora estoy inmerso en una nueva novela, que es un asunto muy absorbente. Pero aún, así, también escribo artículos, poesía, relato corto y microrrelato. Mis planes son escribir y seguir publicando hasta que el cuerpo aguante. Probablemente, en el año siguiente, en 2022, entregue una nueva obra para todos los lectores. A pesar de los sinsabores de este oficio, que son bastantes, opino que ser escritor es el oficio más bonito del mundo. Muchas gracias por la entrevista, por sus preguntas tan certeras.