Un poco de respeto para las mujeres que luchan por su derechos y podrá el feminismo en general, Francisco Atanasio
Francisco Atanasio Hernández 4-3-2021
UN POCO DE RESPETO PARA LAS MUJERES QUE LUCHAN POR SUS DERECHOS Y PARA EL FEMINISMO EN GENERAL
La lucha de las mujeres por sus derechos en España ha sido un camino muy largo y lleno de dificultades, aunque es verdad que en lo que se refiere a la igualdad todavía les queda un largo trecho que recorrer.
La primera vez que se reconoció el derecho al voto femenino en España fue en 1931, y lo ejercieron por primera vez en las elecciones de 1933, luego, tras el Golpe de Estado de Franco y la dictadura fascista de casi 40 años no volvieron a ejercer el derecho al voto hasta 1977, pues durante la dictadura franquista, las mujeres fueroneducadas para ser “amas de casa”, por lo que se les preparaba para casarse y procrear, y aunque como siempre hubo excepciones, la inmensa mayoría cumplió con su cometido.
Sin embargo, los movimientos feministas en este país de sol y panderetacomenzaron a andar hacia la mitad de 1970, en las Comunidades Históricas de Cataluña, País Vasco y Galicia, que siempre fueron las más avanzadas del país, por lo menos es lo que nos muestran los adhesivos de la época.
Dispongo de una buena colección de adhesivos (pegatinas), feministas con las que se puede observar la evolución del feminismo en España, y el día 8 de marzo se comenzó a celebrar en los años 80 como DÍA DE LA MUJER TRABAJADORA, y posteriormente se cambió la denominación por DÍA INTERNACIONAL DE LA MUJER.
10 años del movimiento feminista 1975-1985
Temas, como los anticonceptivos, el aborto, la violación, la violencia de género, la diferencia salarial, etc., etc., han sido, y algunos siguen siendo reivindicaciones tradicionalmente reclamadas por diferentes colectivos femeninos.
No obstante, tengo que decir, que ni todos los movimientos feministas ponen el acento en los mismos temas, ni tampoco sus formas de reclamarlos son iguales, por lo que se podría decir que el movimiento feminista se fragmenta según los programas que defienden, progresistas, feministas integrales, lesbianas y transexuales.
Por supuesto, entre la sociedad también hay diferencias a la hora de valorar, tanto los planteamientos como las formas de lucha que presentan cada uno de los colectivos femeninos, y como es natural no todos los planteamientos son aplaudidos por la sociedad en general y por los varones en particular, y mucho menos por los partidos de la derecha y los ultraderechistas que rechazan los derechos de la mujer abiertamente, y las prefieren en la casa limpiando y cocinando.
También yo, tengo cierta simpatía por los planteamientos de muchos de estos colectivos femeninos, pero no de todos, porque como en todos los aspectos de la vida, hay quienes con el pretexto de luchar por sus derechos, suelen invadir los derechos de otros, el de la pareja, el del hermano, el ex esposo, el de los varones en general, y eso ya no es justo y nunca lo apoyaré.
Yo que viví activamente los años de la transición, vi cómo daban sus primeros pasos algunas de las organizaciones feministas de Cartagena y Murcia, y en aquellos tiempos eran pequeños grupos de mujeres con más voluntad que medios, a diferencia de la actualidad, que la mayoría de las organizaciones están institucionalizadas y muchas de ellas disponen de locales donde reunirse y respaldo económico de los ayuntamientos y de las comunidades autónomas.
Hace un par de años asistí a una manifestación feminista y tuve la satisfacción de ver a unas jóvenes que portaban una pancarta con un lema que creo que no es necesario explicarlo “Somos las nietas de las brujas que no pudisteis quemar”.
Somos las nietas de las brujas que no pudisteis quemar. 2018
Sin embargo, a estas alturas del siglo XXI nadie, nada más que la derecha más rancia y reaccionaria, puede negar ya que las mujeres se han ganado su espacio en la sociedad, no sin dificultades de todo tipo, incluso hasta hoy, Día Internacional de la Mujer, están siendo atacadas por los que pretenden que la sociedad se quede anclada en el Medievo.
8 de marzo día de la mujer trabajadora
El año pasado por estas fechas, nadie pensaba en que la pandemia estaba acechando, y tanto el movimiento feminista, como toda una serie de actividades lúdicas, todo tipo de deportes, entre ellos fútbol a todos los niveles, teatro, cine, etc., incluso Vox, el partido más intransigente, racista y peligroso de la política actual española,organizó una asamblea multitudinaria en Vistalegre, con el dirigente Javier Ortega Smitch infectado del Covid-19 que trajo de Italia, y que como se supo, contagió a otros “camaradas” del partido ultra, todas las actividades se realizaron con normalidad por toda la geografía española, pero después toda la derecha, PP. Vox, Cs, y la mayoría de la prensa se ensañó con la manifestación del Movimiento Feminista en Madrid.
Ahora igual, la derecha, la ultraderecha y buena parte de la prensa, respaldadas por algunas ministras del actual “Gobierno más progre de la historia” se han empeñado en que las feministas no se manifiesten, ni siquiera manteniendo las medidas de seguridad.
Ninguna violación sin castigo
Lo verdaderamente trágico, es que esas mismas ministras que ahora quieren dar lecciones de civismo y de lucha por la salud de la ciudadanía, no dijeron una palabra cuando hace unos días, un numeroso grupo de nazis se concentraron en Madrid, con símbolos de su ideología genocida, consignas antisemitas y banderas anticonstitucionales, que a cualquier demócrata debería ruborizarle, pero a ellas parece que no les importó mucho.
No más juicios por aborto
Durante toda la pandemia en Madrid se han estado manifestando con y sin mascarilla, negacionistas y fachas del Barrio de Salamanca, y en Navidad se celebró un concierto de Rafael en lugar cerrado con asistencia de más de 5.000 personas, pero para todos esos actos las ministras y ministros socialistas no tuvieron una sola palabra de reproche.
Ahora sí, todos esos hipócritas y fariseos que antes hicieron la vista gorda con los gestos fascistas y que quierenaparentar ser “personas de orden” y “demócratas de toda la vida”, pretenden convencernos de que las mujeres no se manifiesten para proteger a la sociedad del Covid-19.
Mentira pura y dura, lo cierto es que han cedido, como siempre, ante los poderes fácticos y ante la presión de los fascistas.
Incluso el Delegado del Gobierno de Madrid, que ha permitido tantas barrabasadas de los fascistas madrileños, ahora niega a las mujeres su derecho a manifestarse, eso para que muchos se enorgullezcan de tener el “Gobierno más progre de la historia”.
Por último, como se habrá podido observar este escrito va acompañado de una serie de “pegatinas” feministas de mi colección.
Derecho al aborto. Las mujeres deciden.
No más agresiones