Año 1944, nace la procesión de “la burrica”, Domingo de Ramos

Andrés Hernández, Cuadernos Cofrades
Andrés Hernández, Cuadernos Cofrades
Año 1944, nace la procesión de “la burrica”, Domingo de Ramos

Año 1944, nace la procesión de “la burrica”, Domingo de Ramos:

Terminada la Semana Santa del año 1943 y, tras las exitosas innovaciones ideadas por la cofradía contraria, los californios, más arrastrados por ímpetu de rivalidad que por el del implemento de los desfiles pasionales, pretendían sacar una nueva procesión, como así anunciaron en prensa a finales de la Semana Santa anterior, y ratificaron para este año del 44 en Cabildo.

Antes de vivir este dulce momento procesionista los californios ya barajaban la idea de sacar un cortejo en la tarde del Domingo de Ramos con un matiz diferente a los desfiles del resto de la semana, intentando plasmar en la ciudad la alegría vivida con la entrada de Jesús en Jerusalén casi tres mil años antes. La diferencia en el cortejo la marcaría la inclusión o, más bien, sustitución del tradicional penitente por los niños que fueron determinantes figuras desde el principio de los cortejos en el siglo XVIII, representados como volantes y angelitos, ya, igualmente protagonizaron sus propias procesiones en el Lunes Santo como Cofradía infantil de San Juan Evangelista, los hebreos y las figuras de personajes y motivos bíblicos éstos ya procesionaron en 1906 y, posteriormente, desaparecieron del Miércoles Santo, reincorporándose al nuevo cortejo vespertino en este  año. La novedad y el éxito fueron producto de la mezcla de dichas figuras, así como la frescura inyectada al nuevo cortejo. No en vano, se efectuaron continuamente a lo largo de los años innovaciones, siempre con resultados positivos para la procesión. Los hebreos adultos fueron paulatinamente siendo sustituidos por infantiles, alcanzando así la plenitud en el cortejo con la constitución del tercio infantil de Soldados Romanos en 1998.

 Ya en 1906 se crearon en la cofradía california que, entonces presidia el cónsul de Rusia y amigo del gran boato Ricardo Spottorno Bienert, dieron a la cofradía un nuevo impulso además de conseguir para la Semana Santa de 1907, y así fue, la creación de un tercio de hebreos formado por 60 componentes 40 hebreos y 20 levitas y en el que, además, formarían los que pasarían  a ser denominados personajes bíblicos:, Moisés, Josué, David, El Sumo Pontífice, Herodes Antipas, el faraón Ramsés II y otros trece levitas encargados de conducir el Arca de la Alianza.

      La ubicación de los personajes bíblicos era tras los “Samarios” aquel Miércoles Santo, así conocidos por ir acompañando al trono de la Samaritana, luego se incorporaron en la mitad del Domingo de Ramos acompañando a la Borrica como paso a conocerse.

Así. El Domingo de Ramos, 2 de abril, sale por primera vez a las calles de Cartagena la procesión de la Entrada de Jesús en Jerusalén, procesión que representaba un sueño californio convertido en realidad y la esperanza de afianzarla en la Semana Santa, hecho sobradamente consumado, ya que hoy no se concibe la Semana Santa de Cartagena sin los pequeños penitentes adornando de alegría y joven pasión cofrade las calles de la ciudad el Domingo de Ramos. Este primer año y algunos restantes la procesión estuvo formada solamente por el tercio de Soldados Romanos, el pueblo hebreo y el trono de “la Entrada de Jesús en Jerusalén” que utilizó para su salida el trono del Ósculo. El grupo escultórico lo formaron imágenes sin uso o con otro destino, que casualmente, un grupo de mayordomos de la Cofradía junto al Hermano Mayor decidieron colocar en tal peana, estas imágenes fueron, el Jesús de la Santa Cena, la figura de un hebreo que vagaba por los almacenes de la Hermandad sin pena ni gloria, la misma imagen que en su día pensaron introducir sin éxito como Judas en el grupo del Ósculo,  y por último, la joven hebrea, que no era otra que una imagen “comodín” que usaba la Cofradía en esporádicas ocasiones, fue la misma imagen que sirvió para representar a la Stma. Virgen en la procesión del Miércoles Santo de 1940, igualmente fue la misma imagen que en 1957 procesionó la agrupación de San Pedro el Jueves Santo en el cortejo del Stmo. Cristo de los Mineros como Santa María Magdalena en el Calvario. Nicolás Martínez Ramón fue el encargado de hacer la burra y el pollino que acompañan a Cristo. Los hebreos usaban los antiguos trajes desechados y primitivos del Miércoles Santo y los trajes que faltaban se suplieron con las túnicas de penitentes de los propios tercios.