Cristo del Socorro

Viernes de Dolores de madrugada surge de la oscuridad el Cristo del Socorro. Es la primera procesión de España y con la responsabilidad que ello implica en los penitentes y portapasos del Cristo del Socorro y Santísima Virgen de la Soledad del Consuelo
Fue en al Año 1961. Tras la Llamada del 15 de febrero dónde surge la Reconstitución de la Cofradía del Santísimo Cristo del Socorro el 9 de marzo. Tercera Reconstitución realizada por el Cofrade don Juan Jorquera, revitalizando la que se fundara en el siglo XVII por el Duque de Veragua.
Así, los fines de esta Cofradía FUERON Y SON prorrogar el culto a su titular, principalmente extender la caridad, el consuelo y la fe a todos los necesitados del barrio lindante de Santa María La Vieja, antiguo barrio de pescadores y celebrar misas, predicaciones y novenarios ante el Cristo, además, requerir el auxilio divino al celebrar una procesión en la madrugada del Viernes de Dolores, festividad de la Patrona de Cartagena y mostrarse en público siempre, con gran humildad y pobreza voluntaria, vistiendo túnica de ESTAMEÑA o tejido similar, con cíngulo de esparto o pita, llevando un trono “MODESTÍSIMO” alumbrado con cuatro grandes faroles de velas y recorrer las calles humildes y colindantes a la iglesia. Luego, en 1980 se le sumaría al cortejo la imagen de la Santísima Virgen de la Soledad del Consuelo. Ubicada a la sazón durante un tiempo en la Capilla de la Plaza de Toros.
En innumerables ocasiones se ha descrito la creación de esta Santa, Real e Ilustre Cofradía, pero hay que incidir en lo milagroso de su advenimiento, que no fue otro que rendir verdadera pleitesía a la solidaridad y al agradecimiento divino, entonces, treinta y tres hidalgas almas cartageneras le dieron vida, sí, quizás excesivamente selectiva pero curiosamente efectiva. Fue un 13 de marzo de 1689 cuando tuvo lugar la curación milagrosa de uno de los hijos del noble ante el Cristo, probablemente del que fuera VIII duque de Veragua, Pedro Colón de Portugal y Ayala hijo nacido del matrimonio del noble con Teresa Mariana de Ayala Toledo y Fajardo de Mendoza, I marquesa de San Leonardo, X marquesa de la Mota y condesa de Ayala, y fue el milagro ante la imagen del Crucificado, el Cristo del Socorro, que se veneraba en la Catedral de Cartagena y que había salido en rogativa, factiblemente por epidemias en la zona, muy peculiares y frecuentes en aquellas fechas. Esta Cofradía fue fundada pues en 1691 por Pedro Colón de Portugal de la Cueva y Enríquez, VII duque de Veragua y Capitán General de las Galeras de España, además de ser VI duque de la Vega, VII marqués de la Jamaica, VII conde de Gelves y marqués de Villamizar.
Los estatutos, aprobados por el Obispo de Cartagena de entonces, don Antonio Medina Cachón, el 2 de febrero de ese mismo año donde el Duque, agradecido, organiza la Ilustre Cofradía de la Hermandad de Caballeros del Santísimo Cristo del Socorro, siendo ésta una cofradía de carácter devocional y así la conformarían como una Cofradía solidaria y agradecida, y así ha llegado a nuestros tiempos tres siglos más tarde, a pesar de que en aquellos tiempos se establecía una tacita competencia entre los miembros de la propia oligarquía generada, accediendo a esta institución a través de la cultura y el dinero, hoy perdido en los paradigmas de la evolución humana. Entones la Cofradía exigía el estatuto de nobleza, ni siquiera exigente en el Concejo de la época, de hecho, incluso excluía a los que tuvieran padres o abuelos que hubieran ejercido oficios artesanales, tanto mecánicos como de orfebrería o comerciales
Más tarde se pierde en los entresijos sociales tal Cofradía. En 1821, España vive unos momentos de especial convulsión religiosa, con la Desamortización del ministro de la regente María Cristina de Borbón, Mendizábal, tuvo unas consecuencias muy importantes para la historia social de España, aunque sus resultados fueron relativamente pobres. En Cartagena provoca penurias como la expropiación del convento de San Francisco, la degradación de las cofradías y sobre todo la ruina de la Catedral de la ciudad, lo cual deriva en la desaparición de la Cofradía del Socorro. Volvería a ser instaurada en 1879, para desaparecer en 1936, con la llegada de la Guerra Civil española.
En 1961 se refunda una vez más, El Ilustrado Jerónimo Pérez Hernández junto al mencionado Juan Jorquera la retoma como cofradía penitencial de esta tercera etapa organizando desde entonces el Vía Crucis en la madrugada del Viernes de Dolores, que es la primera manifestación pasional de España. El Vía crucis partía de la antigua capilla del Cristo del Socorro, en las ruinas de la Catedral antigua de Cartagena. El rescate arqueológico del Teatro Romano junto a las ruinas de la Catedral impide procesionar desde ese histórico lugar, con lo que el Vía Crucis parte cada año desdé sus inmediaciones. Un tambor con sordina, el silencio, la austeridad y el recogimiento son señas las verdaderas identidades en su discurrir por las más antiguas calles de la ciudad.
Hoy los cofrades del Cristo Moreno siguen siendo caballeros de la solidaridad, su mensaje en el siglo XXI es la colaboración y la ayuda social, máxima cristiana que, hacen grande a sus integrantes y sobre todo a sus directivos. Son muchos los frentes solidarios y de apoyo abiertos y a pesar de los escasos medios que mantienen, este grupo de cofrades dan ejemplo permanente de austeridad, humildad y devoción al más necesitado,
El Cristo del Socorro que refundara Juan Jorquera se convirtió en un refugio para procesionistas de bien, todos teníamos y tenemos cabida, todos alcanzamos la redención personal en esta madrugada alejándonos de la miseria que significa la egoísta grandeza y del crítico rosario de intereses que siempre salpican a los que se han dejado la hiel en este paraninfo cristiano que es nuestra Semana Santa,
DE LA MUY DEVOTA, VENERABLE E ILUSTRÍSIMA COFRADÍA DE LA HERMANDAD DE CABALLEROS DEL SANTÍSIMO Y REAL CRISTO DEL SOCORRO