Montanaro de aquí: EL WÁTER SIN GATE CARTAGENERO

EL WÁTER SIN GATE CARTAGENERO

No es nuevo que ganar una pasta por ser concejal y en la oposición y además ser portavoz no está a la altura de muchos, máxime cuando el trabajo profesional no alcanza tales emolumentos, además, cuando los procesos y las tiranteces internas de partido, en este caso locales, son más de interés personal que del objetivo a alcanzar que es la gestión al ciudadano, pues empezamos a echar el primer ingrediente a la coctelera del apogeo frívolo de poder y su repercusión mediática, en este caso vermú cartagenero de la Fuente de la calle Caballero. MC asumió la esperanza de muchos cartageneros, a muchísimos nos defraudó el anterior líder y alcalde desde el minuto 1, y el relevo no lo ha desmerecido, si bien al contrario, una suerte de listillo que nos da lecciones a todos los cartageneros cada vez que habla, más escorado a la Castejón que a Noelia, por lo de la verborrea soberbia y pedagógica que toca las narices, parece tomarnos por gilipollas  a los cartageneros, sinceramente se indigesta, no sé exactamente cuál es el libelo, el relato o la narración de las disputas internas, lo cierto es que el acta es personal y este no la deja ni con lejía, haciendo un “sánchazo” que diría el letrado y no este, problemas de ser un personaje público y cobrar de los cartageneros.

Me consta que, tanto Diego Salinas como su compañera de arrebatos municipales, tiene una descarada confianza con el resto de ediles y trabajan codo con codo intentando adecentar la política municipal, se sumergen en problemas comunes y diarios de difícil factura y buscan además de la foto, que también dar luz a los entuertos, con lo que es de difícil justificación su intento de salida, es lo mismo pero no, estarían en medio de una vorágine de enfrentamientos donde saldrían escaldados, también es cierto que como estrategia MC, queriendo o no,  ha dejado claro que los concejales de VOX son una espada pesada sobre el gobierno de Noelia o el de ellos, un solo concejal puede editar tanto el prólogo como el epílogo del gobierno y enviar al estercolero del ostracismo al que corresponda, echando un pulso a Noelia en este caso, ya se guardará mucho de su despotismos y soberbia, la humildad va por barrios y por momentos e intereses, los inicios enmascaran la realidad y los finales la destapan, estamos a medio camino despojándose de la careta y no por los extramuros, estos se ignoran.

Noelia, la que cantaba Nino Bravo “Hay una chica que es igual. Pero distinta a las demás”, tiene a la ciudad hecha, si no unos zorros sí unas perras con pedigree, su centro está blindado pero sus extramuros despreciados, y uso este adjetivo sin impunidad léxica, es cierto que la degradación del barrio de San Antón es notoria y verificable, dejar caer los barrios colindantes a la ciudad para convertirse en guetos de la inmigración no es de recibo, solo pasar por las inmediaciones impone una suerte de desgarro sentimental y frustración al ciudadano, uno ya se siente incómodo y desplazado en ese paseo de fortuna, y ahí, es determinante el ayuntamiento, el mismo que está a otras cosas, a la foto y a la portada mediática más nacional que local.

Decía Nino Bravo en voz de los cartageneros que “Yo quiero hablarle de mi amor por la ciudad. Pero ella da la espalda y se va, parece que me va a llamar, y luego huye sin hablar”. Noelia está al relato supranacional, un posible destino de “libre designación” -a dedo y con apadrinamiento- en el partido de alto rango que acaricia, la -por esto del laísmo madrileño- hace disfrazar la gestión de la legislatura cartagenera con caretas y máscaras, y son hechos, el primero ha sido darle el idealista doctorado a Jáudenes, un super concejal condenado al ascenso político popular, creado al efecto para el relevo de Noelia en próximas elecciones, con currículo, propio de la Universidad política del PP en Santa Florentina con ascendentes en Murcia, no lo duden, esa universidad populista más que popular que designa nuestros gobernantes futuros escamoteando listas abiertas para no joderles el negocio, porque es un negocio político laboral para elites familiares de distinta ralea, casta o linaje, llámenlo como quieran. Podemos culpar a los socialistas del ostracismo cartagenero, pero si no hay Gorguel, no hay Ave y no hay ZAL, entre otras, no es reciente y el PP de Noelia y López Miras son tan culpables o más, y del campamento de inmigrantes actual también, en una jugada de interés nacional, suscrita a través de mentiras y conjuraciones de aquelarres. Rescato a Nino Bravo, “Hace tiempo que no he vuelto a verla. Y ya no sé qué será de Noelia. Por la noche la busco en la playa. Y en el silencio yo grito. ¡Noelia!

Así las cosas, cada maestro tiene su librillo, los socialistas se encumbran en primarias maniobradas en debates estériles, pero al final son hereditarios como la nobleza pagana, esa aristocracia oxidada de la “fea o el feo de la boda” que grita “si no lo quiere para mi” es dónde se sitúan los comunistas, llámense como quieran, casi despreciados en general y sin el casi como en Cartagena con en particular. Los locales independientes del concejo murciano son de los que pasan por ahí y son conocidos, ni siquiera allegados, que se hacen su particular licencia política laboral y cuando llegan al objetivo se pierden en la noche, luego vuelven a empezar  y así les va, el yo más, y me queda VOX, de la universidad de la dedocracia del PP ya he hablado, así que conseguir cerrar una lista de destacados currículos en el partido d e Abascal no es fácil, al contrario que el PP y PSOE, les sobran aspirantes…, no están representados los primeros, diría veinte posibles pero quizá no acierte, me quedaría corto, puede ser por lo abultado de la nómina, pudiera ser, que no lo es, o por la huida en cascada como los fondos europeos.

¿Nos hemos preguntado por qué la gente con experiencia, con talento y con sabiduría, gente a mitad de camino entre la política y la tecnocracia, con nombre y trayectoria, con trapío social desprecia los avatares de la política?

Contubernios. Primero fue la indolente concejala con sueldo de la tómbola Nescafé del PSOE y el ostracismo de su anonimato con MC quienes pusieron la sal y la pimienta al entramado maquiavélico mediático de la política local, luego el Sí de las niñas desterrado del arco socialista con Noelia repartiéndose el populismo mediático y joder, que empalago…, y ahora, el complot pueblerino, la conspiración estúpida de escayola, la ensalada amarga, el rey de bastos atacando a la reina de copas y conspirando con el rey de espadas para acabar con la reina de oros, ¿que será lo siguiente, una mascarada con la baraja francesa en un despropósito exceso político? Esto no ha terminado mientras haya legislatura hay esperanza… El caso es que no tenemos a los mejores, tenemos a los que les interesan a los partidos para sus negocios políticos cuasi “wokes”.

¿Tenemos lo que nos recemos?, parece que nuestros representantes son un reflejo claro y nítido de la sociedad, en este caso cartagenera.

Andrés Hernández Martínez